GRANDES PLUMAS IV

¡¡¡YO LEVANTARÍA LA TRICOLOR!!!


Muchas veces pienso en nuestro glorioso pasado, una España temida y temible, una España unida y bañada de grandes victorias, un hombre, un soldado, que luchaba y amaba a su bandera conquistando el mundo con poco más que un arcabuz ...

Pero de aquellos tiempos pasados ya no queda nada, tenemos un país simple y poco comprometido, una juventud callada y amordazada por los precios, la vivienda y el paro; un grupo intelectual que solo habla en pasado; lejos queda aquellos años en los que nuestros padres se echaban a la calle por sus derechos, por su constitución o por su autonomía, aquellos eran otros tiempos, o eso supongo yo...

Esta es la España que me ha tocado vivir, la España europeísta que nos arruina y nos estrangula con sus directrices de futuro.

Mirando al presente, veo el espectáculo de nuestros políticos, las campañas, los insultos, el dinero, la inmigración...cierro los ojos y entiendo la falta de motivación y participación en la mayoría de los procesos electorales, una izquierda que no se encuentra representada en Zapatero y una derecha que exige más mano dura a Rajoy. Un bipartidismo a lo Canovas del Castillo no nos llevara a ningún destino, bueno si, a quedarnos en casa el domingo…

Necesitamos levantarnos, sentirnos, identificarnos, ser fuertes, ser ciudad comunidad y país al mismo tiempo. Sentir que alguien de los de arriba se une a nosotros y nos entiende. Alguien que ilusione, con carisma, que eche la gente a la calle...que locuras digo en S.XXI.

Pues me levanté buscando a ese referente y caminando por mi bonita ciudad me encontré a un hombre serio, barbudo, espigado.... el Califa Rojo. Don Julio Caminaba despacio, pero de forma continua, meditaba frente a un joven naranjo que empezaba a florecer, con su sola miraba consiguió estremecerme…

Un hombre que hizo levantar a una ciudad y casi a un país...un hombre por el que yo levantaría la tricolor y por el que levantaría el puño en alto, por el que entonaría el himno de Riego y votaría en cada elección.

Alguien con carisma, que transmita, que hable claro...que elimine a esa clase aristócrata, que vive del esfuerzo de nuestros antepasado, que mande con el pueblo sin frenos reales ni nobiliarios...Llámenme lo que quieran, opinen lo que quieran, pero como todo siga igual el domingo me quedo en casa.

P.D. CAPI